Desgraciadamente, la profesionalidad no siempre se da por supuesta. La elección de la empresa de construcción de confianza comienza con una amplia investigación y es importante comparar varias ofertas. Sin embargo, esto suele ser difícil porque los materiales, los elementos y el alcance de los servicios ofrecidos nunca son exactamente iguales.

Por ejemplo, la calidad de los ladrillos puede variar, al igual que la elección de la cerámica sanitaria o los materiales aislantes utilizados, por lo que hay que tener cuidado con las ofertas demasiado baratas. Al fin y al cabo, no es raro que haya defectos que reclamar y que los constructores sólo descubren a posteriori.

Entre los más comunes están

• Falta de elementos
• Fugas en la envoltura del edificio
• Instalación incorrecta del aislamiento

Por lo tanto, además de la comparación de precios, hay que tener en cuenta otros factores a la hora de elegir una empresa constructora.

Una conversación personal con el contratista suele ser muy informativa. Suele quedar claro a primera vista si se trata realmente de un interlocutor competente o si se está ante un charlatán. Las buenas empresas constructoras responderán con profesionalidad a las objeciones e incluso las abordarán ellas mismas, en lugar de aceptarlo todo. Si cada pregunta se reduce inmediatamente a una nimiedad, es probable que el contratista carezca de experiencia.

Así que con un contratista adecuado, debe esperar respuestas competentes a sus preguntas y preocupaciones. En cualquier caso, es importante mantener una discusión detallada sobre los puntos individuales del proyecto de construcción, en la que se aborden de forma competente las áreas específicas. Siempre es mejor que las soluciones alternativas se aclaren inmediatamente en persona.

Las bonitas casas modelo que aparecen en un folleto, por desgracia, no garantizan su realización real. Por lo tanto, es ventajoso informarse de antemano sobre los ejemplos de referencia y también visitarlos. Normalmente, una empresa constructora de renombre ya ha recopilado una selección de proyectos en su página web. Y, por supuesto, también hay un gran número de empresas aún jóvenes en el mercado. Aquí se puede compensar mucho riesgo en una estrecha colaboración y con el pago según el progreso de la construcción. Y todo el mundo debe ser consciente de que la calidad es muy subjetiva. Así que tiene sentido incluir una empresa joven en la selección.

También es aconsejable obtener las experiencias de otros antiguos clientes. Los constructores son los más indicados para dar cuenta de sus impresiones de primera mano. Preguntar por las evaluaciones y referencias actuales no es en absoluto un error. Aquí, por supuesto, siempre hay que tener en cuenta hasta dónde se empuja el asunto para tomar una decisión.

Hay que tener claro que probablemente no haya ninguna empresa de construcción en la que algo no haya ido tan bien. Por lo tanto, tiene más sentido involucrarse personalmente y participar directamente en la creación de su propia casa. Así se pueden resolver inmediatamente los problemas o aportar ideas directamente.

Si no obtienes respuestas por esta vía, también puedes informarte en una de las llamadas asociaciones de constructores. Hay asociaciones en casi todos los países del mundo que asesoran a los constructores y, si es necesario, también ofrecen asesoramiento jurídico. Sin embargo, estas consultas están sujetas a una tarifa.

La celebración de un contrato es, por supuesto, uno de los componentes más importantes de la construcción de una casa. Sin embargo, desgraciadamente, muy pocas personas saben exactamente cómo debe ser este contrato. Porque la mayoría de las empresas constructoras se basan en contratos modelo, y ahí es donde radica el problema. Aproximadamente el 50% de las preguntas de estos contratos no están claramente cubiertas. En caso de litigio, puede ser muy difícil hacer valer sus derechos frente a la empresa constructora.

Los puntos más comunes que suelen faltar son ciertos acuerdos, como

• el alcance de los servicios (aquí debe describirse exactamente en qué ámbito se entregará la casa al final)
• una fecha concreta de inicio y finalización
• el tipo y la calidad de los materiales de construcción (aquí deben especificarse los materiales de construcción)
• el nivel de equipamiento de la casa
• la garantía de funcionamiento del banco

Dado que la realidad ofrece especificaciones individuales para cada proyecto de construcción, también es importante un ajuste individual del contrato de construcción. Una empresa de confianza no tendrá problemas con estas fijaciones por escrito. Al contrario, incluso revisará y confirmará el contrato junto con usted. Con un contrato de construcción transparente y detallado, ambas partes, el cliente y la empresa constructora, están en el lado más seguro.

Una buena empresa debe acordar una fianza de cumplimiento. Esto garantiza que el banco devolverá el dinero del cliente si no se cumple el contrato.

No debería firmar proyectos de construcción de mayor envergadura sin entregar la fianza de cumplimiento. Porque está bastante justificada y además debe ser aprobada por la empresa constructora.

Sin embargo, si su proyecto de construcción es más pequeño y, por ejemplo, usted mismo ayuda en la obra y paga según el progreso de la construcción, puede alcanzar su objetivo incluso sin una fianza de cumplimiento.

También es importante conocer los derechos de la inspección del edificio. Si alguna vez surgen dudas, siempre puede hacer que un experto inspeccione la propiedad y las distintas fases de la construcción.

Incluso es posible que las distintas fases de construcción sean controladas básicamente por un experto.

De este modo, ambas partes pueden concentrarse tranquilamente en la siguiente fase de construcción.

Porque si se descubren a tiempo los defectos o daños, se pueden evitar algunos daños consecuentes. Los controles de calidad son legítimos y definitivamente una prevención sensata para cualquier proyecto de construcción. En principio, un retraso notable en el proyecto de construcción indica un posible cuello de botella financiero para la empresa. En cualquier caso, merece la pena abordar este punto rápidamente. Una salida es la compra de materiales de construcción por parte del propio constructor. Esta circunstancia crea aire para la empresa constructora y puede continuar en la obra.